Los que me conocen saben que mi pasión era el "deporte de las trompadas" hasta el día en que un mal golpe le quitó la vida a mi paisanito "El Texano"; y aunque el fútbol no es menos peligroso y es capaz de causar en las personas las más violentas e inesperadas reacciones, no dejo por eso de apoyar a mi selección en los partidos más relevantes.
Los niños no son la excepción cuando de animar a nuestro equipo nacional se trata. Gracias a la SEP, quien otorgó permiso a las escuelas para instalar un televisor en las aulas, los chiquillos pudieron disfrutar del primer partido del mundial (lo que yo, sinceramente, no vi con muy buenos ojos, pero esa, es otra historia...).
Aquí unas coloridas imágenes:
Sintonizando su televisor antes que diera comienzo el partido México-Sudáfrica.
Con "la verde" (y la roja) bien puesta sobre el uniforme y la bandera tricolor en las sonrientes mejillas.
Ayudando a ponerse "a tono" para la ocasión. Y yo también con ellos; un poco para identificarme con mis alumnos, un poco por amor a "la camiseta" de mi país.
El fútbol en México no es deporte exclusivo de hombres. Las niñas estuieron atentas a los movimientos de la pelota.
Botanas, refrescos y taquitos no podían faltar en esta celebración.
Fue tanta la bulla por el primer gol anotado (que después nos anularon), que algunos preferían taparse los oídos.
Con toda esta algarabía no pude dejar de recordar al Morro y su popular tema: "Yo no Quiero Escuela, Prefiero el FUTBOL".¨
*El día de hoy, para satisfacción de millones de mexicanos, México derrota a Francia 2-0.
